Ofrecer a los pacientes un espacio de atención acorde a las necesidades.
Brindar atención integral, donde esté sumida la prevención, el tratamiento y la rehabilitación de la población con necesidades específicas, discapacidad mental, física o sensorial; además de problemas de aprendizaje, lenguaje o trastornos de conducta.
Fortalecer los vínculos familiares aportando orientaciones a través de reuniones específicas de reflexión y talleres en relación al estilo de crianza y acompañamientos cotidianos.